Sergi Cardona: Enfrentando su mayor desafío

El lateral izquierdo del Villarreal, Sergi Cardona, se encuentra en uno de los momentos más difíciles desde que llegó a la localidad castellonense. Indiscutible en los planes de su entrenador, Marcelino García Toral, ha sido titular en todos los partidos en los que ha estado disponible, salvo en la jornada 16 ante el Athletic Club, donde tuvo que cumplir un partido de sanción por acumulación de tarjetas. Esta situación se ha visto favorecida por la falta de alternativas en la plantilla, ya que fue el único lateral izquierdo disponible hasta hace poco.

La reciente lesión de Alfonso Pedraza ha llevado a Cardona a asumir una carga de minutos muy elevada, pero eso no ha impedido que su rendimiento sea notable, destacándose a principios de 2025 al sumar cinco asistencias en solo cuatro jornadas. Sin embargo, en las últimas dos fechas, coincidiendo con las derrotas del Villarreal ante el Athletic y el Real Madrid, su rendimiento ha experimentado un notable descenso. Esto ha llevado a Marcelino a sustituirlo antes de lo habitual, justo cuando Pedraza comenzaba a recuperarse.

En el partido disputado en Mendizorroza, Cardona fue reemplazado en el minuto 70 para dar entrada al lateral cordobés, quien parece estar recuperando su forma. En la siguiente jornada contra el Real Madrid, su salida del campo se produjo en el minuto 63, después de una actuación que dejó mucho que desear y tras recibir una tarjeta amarilla. Con Pedraza ganando minutos y mejorando sus sensaciones en el terreno de juego, todo parece indicar que el protagonismo de Cardona podría verse reducido, lo que le coloca en una situación bastante comprometida.

El desafío se intensifica para Sergi Cardona, quien deberá apretarse las tuercas si desea mantener su puesto como titular en el Villarreal. Marcelino, por el momento, parece tener una devoción particular por su competidor, lo que añade un extra de presión al joven lateral. La competencia en la plantilla se vuelve cada vez más intensa, y la necesidad de rendir al máximo se convierte en un imperativo para los jugadores, especialmente en una liga tan competitiva como la LaLiga.